Archivo del Autor: electroletras

Una llamada desde la esquina mientras paseas por el lado malo de la bahía de Bizancio, un empujón que te quite la ceguera, un vaso de zumo de uva recién exprimido, alguna que otra sonrisa forzada acompañando a un saludo. … Seguir leyendo →

A un saltamontes le han cortado las patas traseras y lo han soltado en la playa. La bombilla de la mesa de noche se ha fundido, la prostituta se limpia la boca y se le corre el pintalabios rojo. El … Seguir leyendo →

Eras pura discreción cuando te vio volando sutil entre los papeles de la biblioteca. Puro nervio cuando el torpe de tu compañero volcó la pila de legajos milenarios, porque llevaba las manos ocupadas por cafés. Eras pura sorpresa ante la … Seguir leyendo →

La perrita lloriqueaba sin parar todas las noches. Temía que le acabaran echando del vecindario por culpa de su nueva mascota. Al principio se mostraron comprensivos, porque, ¿quién no ha tenido alguna vez un cachorrillo? Y todos sabían que tarde … Seguir leyendo →

Y entonces comprendí la curvatura, la dirección de las calles de detrás de la iglesia. Cuando se abrió el cielo entre los andamios tirados en el suelo y el ratón se escondió, asustado por las campanas que daban las once, … Seguir leyendo →

La culpa del golpe contra mi coche la tuvo ella, que se saltó un stop. Pero con esos ojos, esas botas altas y ese «espíritu santo» que se gastaba, no me importó disculparle, tranquilizarle, e incluso asumir yo las culpas. … Seguir leyendo →